Conoce la influencia de los mártires en la historia religiosa, personas que dieron su vida desinteresadamente para lograr un fin mayor, un bien común o simplemente demostrar su fe.
Los mártires cristianos
Los mártires, a lo largo de la historia, han sido hombres y mujeres que han dado su vida en sacrificio para demostrar su fe y profesar amor a Dios, de esta manera muchos de ellos lograron convertirse en Santos, después de recibir su beatificación.
Aunque a lo largo de la historia han habido muchos mártires de diversa índole, no solamente religiosa, existen registros históricos de al menos ocho que sacrificaron su vida en nombre de Dios.
San Juan Bautista
El Santo Juan Bautista es uno de los mártires más conocidos y venerados alrededor del mundo, además es considerado como el último profeta en el libro del Antiguo Testamento y el primer Apóstol de Jesús.
Se cuenta que este Santo dedicó su vida a prepararse para la llegada de Jesús viviendo en austeridad y predicando su palabra en Jordán; sin embargo, murió por el capricho de la hijastra del rey de Judea, quién pidió su cabeza como regalo.
San Esteban
San Esteban fungió como un diácono de la iglesia que vivía en Jerusalén y fue martirizado por sus creencias religiosas.
Por su fidelidad a la fe que profesaba, fue lapidado por quienes no compartían su doctrina.
Santa Inés
Santa Inés es la protectora de las novias y las jóvenes casamenteras, ella falleció a edad muy temprana tras el martirio que recibió de Diocleciano.
La joven estaba decidida a los 12 años a dedicar su vida a la fe y al cristianismo y tras recibir maltratos e intentos de vejación fue desvestida y degollada en la plaza, negada a entregar su cuerpo a un hombre.
San Sebastián
San Sebastián era amigo cercano de Diocleciano y aprovechó su posición para evitar la muerte de los cristianos y favorecer la fe en secreto.
Cuando el emperador se enteró de la traición de su amigo lo condenó a muerte, cegado por la ira, hizo que lo azotaran hasta morir.
San Lorenzo
San Lorenzo era un diácono muy joven que fue martirizado bajo el mandato del emperador Valeriano, quien ordenó la ejecución de todos los miembros de la iglesia cristiana como diáconos, obispos y otros.
Así, San Lorenzo sufrió su martirio, algunos cuentan que fue quemado y otros dicen que decapitado.
Santa Bárbara
Aunque se desconocen muchas cosas acerca de Santa Bárbara, se sabe que fue encerrada en una torre por su propio padre, a causa de su belleza.
Cuando por fin logró liberarse de su cautiverio, profesó la fe cristiana y al negarse a dejarla encontró la muerte por decapitación, tras recibir torturas terribles.
Cosme y Damián
Cosme y Damián ahora considerados santos mártires, eran dos hermanos que practicaban la medicina, utilizando su posición influyente para profesar la fe cristiana.
El emperador Diocleciano ordenó detenerlos y, tras infligirles torturas diversas, murieron decapitados.
Santa Lucía
Santa Lucía es considerada una de las siete vírgenes canónicas romanas y murió durante la época del emperador Diocleciano. Esta virgen se negó a casarse con su prometido, ya que deseaba dedicar su vida a Dios.
Ante su negativa de contraer matrimonio y decidida a continuar profesando la fe cristiana, fue torturada y decapitada a la edad de 21 años.
Influencia de los mártires en la historia religiosa
Estos son solo algunos de los mártires más conocidos por la historia religiosa; sin embargo, muchos han muerto martirizados sin siquiera recibir reconocimiento por ello.
Los mártires han influido en la historia religiosa dotándola de valor y demostrando que la verdadera fe puede llevar a la muerte, cuando una persona es fiel a sus creencias en el ser supremo llamado Dios.
De esta manera, los mártires han despertado devoción entre quienes profesan la fe cristiana, lo que ha permitido beatificar a muchos de ellos.